Echevaria agavoides es una suculenta compacta originaria de Mexico  con hojas en forma de roseta, de color verde azulado, con puntas agudas. Atractiva y de fácil cuidado, perfecta para jardinería.

Cuidados de Echevaria agavoides

Requerimientos de luz: Esta suculenta prefiere luz brillante pero indirecta. Colócala en un lugar soleado o cerca de una ventana con luz intensa pero sin sol directo durante las horas más calurosas.

Temperatura: Mantén la temperatura en un rango de 18°C a 24°C durante la temporada de crecimiento. Es sensible a las temperaturas frías, por lo que protege la planta de las heladas. Temperatura minima -7ºC

Riego: Riega con moderación y permite que el sustrato se seque entre riegos. La frecuencia de riego dependerá de las condiciones ambientales, pero generalmente, cada 2-3 semanas es suficiente. Evita el encharcamiento, ya que puede causar pudrición de raíces.

Sustrato: Utiliza un sustrato específico para cactus y suculentas que ofrezca un buen drenaje. Asegúrate de que la maceta tenga orificios de drenaje para evitar la acumulación de agua.

Fertilización: Alimenta tu Echevaria agavoides con un fertilizante equilibrado diluido durante la temporada de crecimiento (primavera y verano). Aplica el fertilizante aproximadamente una vez al mes.

Poda: No es necesario podar esta planta con regularidad. Simplemente retira las hojas secas o dañadas cuando sea necesario.

Plagas y enfermedades: Echevaria agavoides es generalmente resistente a plagas y enfermedades, pero debes estar atento a la aparición de cochinillas u otros insectos. Trátalos con insecticidas específicos si es necesario.

Propagación: Esta suculenta se puede propagar mediante esquejes de hojas. Coloca los esquejes en tierra después de permitir que se sequen durante unos días.

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