Oncidium Twinkle Pearl Red
- Nombre científico: Orquídea Oncidium
- Nombre común: Orquídea Dama Danzante, Orquídea lluvia de oro
- Origen: México, Bolivia, Paraguay, sur de Brasil, hasta Florida.
- Tipo de orquídea: Epífita
- Floración: Primavera. Los híbridos pueden florecer hasta tres veces en un año
- Ubicación: Iluminación intensa. Puede estar en exterior, en un lugar protegido del sol
- Riego: Intenso durante la época de crecimiento (2 a 3 veces por semana), y espaciado durante la época de latencia
- Humedad: Media 40%-60%
- Nivel de dificultad: Media
Las Oncidium son unas orquídeas originarias de la zona de América más tropical: México, Bolivia, Paraguay, sur de Brasil, hasta Florida. Podemos encontrar orquídeas de esta variedad a nivel del mar, en zonas tropicales, o en las montañas de los Andes.
Este género comprende más de 300 especies diferentes, en las que las flores de color amarillo brillante están muy presentes. Sin embargo, esta “clasificación” no es demasiado estable, ya que constantemente se están reclasificando plantas y algunas van a parar a otros géneros, como las Miltonia, Odontoglossum o Brassia.
Su nombre se lo debemos al botánico sueco Peter Olof Swartz, que la denominó Oncidium haciendo referencia a un pequeña protuberancia o callosidad situada en la base del labio de sus flores. En griego, Onkos es hinchazón e -idium es un sufijo diminutivo, pequeña hinchazón o protuberancia: Oncidium.
Vulgarmente recibe sobre nombres como “Lluvia de oro” o “Dama danzante”.
Son muy populares como orquídeas de interior, por sus grandes varas florales que suelen estar adornadas por docenas de flores. Esta es una de las razones por las que recibe el sobrenombre de Lluvia de oro.
En cuanto a Dama danzante, tiene que ver con la forma de su flor, que parece una bailarina. Cuando la brisa mueve las orquídeas, las flores parecen estar ejecutando un baile.
Las Oncidium son unas orquídeas que pueden ser más complicadas de cuidar que otras variedades, como la Phalaenopsis o la Paphioopedilum, que suelen ser algo más tolerantes a las condiciones ambientales.
Es muy importante que reciban la iluminación necesaria, así como definir muy bien los periodos entre riegos.
Sin embargo, si sigues los consejos de la presente guía, estarás en el camino perfecto para tener unas preciosas orquídeas Oncidium.
Lo primero que debemos saber sobre nuestra orquídea Oncidium es que vive como epifita.
La Oncidium crece a partir de pseudobulbos de forma lateral (simpodial). Los nuevos pseudobulbos nacen y se desarrollan a partir de los viejos, a los van sustituyendo.
Sus hojas aparecen desde los nuevos pseudobulbos, su aspecto es estrecho y alargado en forma de punta.
Como en la mayoría de las orquídeas que crecen a partir de pseudobulbos, sus hojas no son carnosas, ya que el agua lo almacenan en sus pseudobulbos.
Las Oncidium son de las pocas orquídeas que resisten el sol directo.
Es importante que el emplazamiento tenga mucha luz, la podemos colocar en una ventana orientada al esto o el oeste, donde reciba la luz de las primeras horas del día.
Como precaución y a pesar de su buena resistencia a la luz solar, lo mejor es que reciba la luz tamizada por un visillo o una veneciana.
En climas templados, podrían estar en el exterior en un lugar protegido de la luz directa, y de orientación sur. En estos casos no hay que olvidarnos de las necesidades de humedad, ni tampoco que no soportan temperaturas excesivas.
Apreciaremos que no recibe la luz que necesita, observando el color de sus hojas.
Unas hojas verdes oscuro indica que recibe poca luz, mientras que un verde rojizo nos advierte de que recibe demasiada luz. Cuando las orquídeas reciben la luz que necesitan, tienen que tener un color verde medio intenso.
EL RIEGO
Las Oncidium requieren algo más de agua que otros tipos de orquídeas, por eso se suele recomendar regar cada dos a tres días en época de crecimiento y una vez al mes (o cada dos) en época de latencia. Sin embargo, esto no es totalmente correcto, lo ideal es regar cuando la orquídea necesita humedad.
Lo mejor es comprobar si el sustrato está o no seco, debería haberse secado al menos la mitad de la maceta para proceder a un nuevo riego.
Durante la época de latencia lo mejor es observar los pseudobulbos para decidir si regar o no. Si los vemos tersos y gruesos, es que la planta está bien y no necesita mucha agua, pero si observamos que parecen marchitarse, hay que aumentar la frecuencia de los riegos.
Los pseudobulbos de la Oncidium son propensos a la putrefacción, por eso es muy importante vigilar los riegos y que el drenaje de la maceta sea correcto. Si vemos que un pseudobulbo comienza a pudrirse, lo mejor es cortarlo con un cuchillo que habremos esterilizado previamente.
Regar siempre por las mañanas y con agua que no contenga sales. Ante la duda, mejor utilizar agua filtrada o embotellada.
Necesidades de temperatura y humedad
El grupo de las Oncidium está clasificado como orquídeas de clima cálido a templado, el rango de temperaturas en el que nos movemos es de entre 15ºC para las mínimas y 30ºC para las máximas (cuidado si las ponemos en el exterior).
Como ocurre con todas las orquídeas, para estimular la floración debe haber diferencia de temperatura entre el día y la noche. Estas diferencias tienen que estar en el entorno de los 10ºC, con la precaución de no sobrepasar los mínimos y los máximos.
El grado de humedad se tiene que mantener entre el 40% y el 60%. Para favorecer este grado de humedad, durante el invierno dentro de casa y en los días cálidos, es conveniente pulverizar las plantas, colocar un humidificador o en su defecto, colocar un plato con agua debajo de la planta, siempre con la precaución de que el agua no esté en contacto directo con las raíces.
Abonado de las Oncidium
En época de crecimiento, y si el sustrato está compuesto de corteza de pino, hay que buscar un abono que contenga una composición 30-10-10 (Nitrógeno-fósforo y potasio). Esta proporción es para compensar el gasto de nitrógeno, que proviene de la degradación del sustrato.
Si el sustrato no es de pino, podemos utilizar un fertilizante más equilibrado 20-20-20.
Durante el periodo de crecimiento conviene fertilizar cada dos semanas, pero a la mitad de la dosis recomendada. También es una buena idea regar abundantemente una vez al mes, para eliminar los restos de fertilizante que puedan quedar en el sustrato.
Ya sabes que los fertilizantes suelen contener sales, que la planta almacena en sus raíces y también se depositan en el sustrato, y esto es muy perjudicial para las orquídeas.
Sustrato y trasplantes
El sustrato que necesitan las orquídeas Oncidium es el típico para orquídeas: esponjoso, ligero, resistente…lo mejor es comprar el que viene preparado, que habitualmente está compuesto de corteza de pino.
De vez en cuando es necesario cambiar de maceta, cuando la planta ha crecido mucho o también cuando observamos que el sustrato ya no drena correctamente.
Estos cambios es mejor hacerlos cuando la orquídea ya ha florecido, idealmente en periodo de reposo.
Antes de hacer el cambio procederemos a limpiar bien el sustrato de todo tipo de polvo, y desinfectaremos bien la maceta lavando con agua jabonosa.
Al realizar el cambio y si la planta lo permite, podemos dividir la orquídea siempre que tengamos al menos tres pseudobulbos en cada planta.