Paphiopedilum ansum es un híbrido de Paphiopedilum que se caracteriza por tener flores de color amarillo vibrante. Esta variedad específica de híbrido ha sido seleccionada y cultivada por su atractivo color amarillo, que añade un toque de luminosidad y belleza a cualquier colección de orquídeas. Sus flores son elegantes y cautivadoras, destacando entre otras variedades de Paphiopedilum.

Cuidados de paphiopedilum ansum

Iluminación: Prefiere luz moderada a brillante, evitando la exposición directa al sol. Se recomienda ubicarla en un lugar con luz filtrada.

Temperatura: Rango de temperatura ideal entre 18°C y 33°C durante el día, y ligeramente más fresco durante la noche (alrededor de 15°C). Evitar cambios bruscos de temperatura.

Humedad: Requiere un nivel de humedad moderado a alto, alrededor del 60-70%. Se recomienda mantener un ambiente bien ventilado y utilizar un humidificador si es necesario.

Sustrato: Utilizar una mezcla específica para orquídeas terrestres , como corteza de pino, musgo sphagnum y perlita, combienene siempre añadir un poco de sustrato orgánico debido a su carácter terrestre Asegurarse de que el sustrato drene bien y no retenga agua en exceso.

Riego: Regar cuando el sustrato esté ligeramente seco, evitando el encharcamiento. Es preferible regar por inmersión o utilizar un rociador fino para humedecer las raíces y las hojas.

Fertilización: Aplicar un fertilizante balanceado para orquídeas diluido cada 2-3 semanas durante la temporada de crecimiento. Reducir la fertilización durante el período de descanso.

Periodo de descanso: Paphiopedilum ansum puede tener un período de descanso durante el cual se reduce la frecuencia de riego y fertilización. Esto suele ocurrir después de la floración, permitiendo que la planta se recupere antes de la próxima temporada de crecimiento.

Transplante: Realizar transplantes cada 1-2 años, utilizando un sustrato fresco. Se recomienda trasplantar después de la floración.

Cuidados adicionales: Proporcionar una buena circulación de aire alrededor de la planta. Controlar la presencia de plagas como pulgones o cochinillas y tomar medidas adecuadas para su prevención o tratamiento. Mantener un ambiente limpio y protegido de corrientes de aire frío.

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